MNCT 942 Profundizando, parte 3 de 3
“In Buddhism, the experience of unconditioned awareness is called “the ultimate medicine”. Other types of medicine – that is, other types of healing – have limitations. They work for some people and not for others, and even then, only some of the time… Every mind touched by the experience of its unconditioned nature moves closer to the experience of genuine freedom, which is, after all, the ultimate healing.”
– Peter Fenner
Hasta ahora en este tip hemos hablado de cómo nuestro nivel de comprensión acerca de quiénes somos, de qué es la vida y de cómo ésta funciona – nuestro “enraízamiento”- marca cada experiencia de nuestra vida, incluyendo el por qué y el cómo de lo que sentimos y hacemos.
Para concluir, quiero compartir uno de los aspectos que, para mi, han resultado más prácticos y sin embargo más sutiles de este entendimiento – cómo la mente funciona, momento a momento, para proveernos con sabiduría, para traernos pensamiento fresco y revelaciones acerca de lo que sea que estemos trabajando en nuestra vida…
3. Conectándose a la sabiduría interior
La mayor parte de mi vida adulta la he pasado intentando crear deliberadamente circunstancias cada vez mejores a través de una combinación de fijación de metas, visualizaciones creativas, determinación y trabajo duro. Si bien he alcanzado el éxito de acuerdo a la mayoría de los estándares, en el camino también contribuí a hacer de mi salud y mi bienestar un verdadero caos, en un momento incluso intenté evitar ir al hospital después de un posible infarto porque estaba demasiado ocupado y tenía un vuelo que tomar.
No fue un infarto, y todo salió bien, pero sí fue una llamada de atención que cuestionó mi nivel de comprensión de la naturaleza de adentro hacia afuera del bienestar. Los dos años siguientes me relajé en cuanto a crear lo que pensaba que necesitaba para estar bien y me enfoqué en disfrutar lo que tenía y en ver lo que la vida me iba a presentar a continuación.
Me decidí a sacar las manos de mi vida y dejar que los resultados se dieran por sí mismos, y funcionó maravillosamente excepto por un pequeño detalle – sentía que ya tampoco podía coachear a mis clientes acerca de sus resultados. Resultó no ser mayor problema, pues la posibilidad de elevar su sentido de bienestar a partir de una conexión con su verdadera naturaleza seguía atrayendo a la gente a mi puerta, pero yo me empecé a sentir como un fraude.
“Ya no quiero ser un coach” me dije, “si lo mejor que puedo ofrecer a mis clientes es “¡Trae tus mayores esperanzas y sueños y yo te ayudaré a que no te importe no lograrlos jamás!”
Mi única opción era hacer mi mejor esfuerzo por enfocar mi atención lejos del problema y esperar que una revelación viniera en camino. Afortunadamente, en este caso, vino – una revelación acerca de cómo lidiar con los resultados y los retos a través de una comprensión más profunda de la manera en que la mente trabaja.
Lo que vi fue que una vez que nuestro pensamiento se asienta, la mente personal se comporta más como un modem que como un reproductor de DVDs. Mientras que una mente demasiado ocupada nos muestra de forma continua un especie de “los mejores éxitos” de nuestras victorias y derrotas pasadas y futuras, una mente acallada es receptiva a una sabiduría más profunda y a un tipo de sentido común “al momento”.
Así es como escribí al respecto en The Inside-Out Revolution:
Llamo a este estado de conexión con el todo “estar en línea”. Es el espacio de claridad y bienestar relativos en el que tenemos acceso tanto a nuestra base de datos personal como a la sabiduría profunda de Mente.
Cuando estamos en línea, podemos estar seguros de que cualquier cosa que fluya a través de nuestra conciencia será de provecho. En esos momentos, la intuición y las revelaciones fluyen por nuestra mente como gigabytes a través de una cable de datos.
Cuando no estamos en línea nos sentimos incómodos, estresados, presionados, asustados, o simplemente insensibles, y nos podemos confundir intentando aclarar las cosas, solucionarlas o sobrepasarlas con nuestra brillantez.
En términos simples, estar en línea se siente mejor – es ese sentimiento más tranquilo, más profundo, al que he estado tratando de apuntar en este tiempo juntos. La gente lo describe como claridad, alegría, felicidad, facilidad, bienestar, o incluso paz. En el silencio de ese sentimiento más profundo podemos escuchar fácilmente la pequeña voz interior. Esta es la manera en que nuestra mente está diseñada para funcionar – como un canal claro para nuestra sabiduría interior.
Cuando estamos en línea, vemos que cualquier situación se puede manejar a través de una combinación de sentido común y acción perspicaz. Cualquier cambio necesario se vuelve evidente, y si bien no siempre se verá fácil, sí se podrá identificar como notablemente claro y directo. La vida deja de parecer abrumadora, y el mundo deja de parecer un problema esperando a ser resuelto.
En lugar de tener que elegir entre obsesionarnos con nuestros resultados e intentar ignorarlos por completo, me di cuenta de que estando en línea – con el pensamiento asentado y abiertos al potencial creativo infinito de Pensamiento – podemos simplemente sentarnos con un objetivo o un reto hasta que la mente más profunda empieza a generar pensamiento nuevo y fresco al respecto de cómo trabajarlo. Como si sostuvieras una mariposa en tu mano, lo suficientemente suave para garantizar su seguridad, pero lo suficientemente fuerte como para evitar que se vaya volando, es posible dirigir el río de las revelaciones en una dirección en particular, simplemente sosteniendo ligeramente esa dirección en nuestra mente y esperando en silencio a que empiece a fluir el pensamiento fresco.
En términos visuales, hacemos la transición de esto:
/_
a esto:
\_
a esto:
|_
Si bien resulta increíblemente útil saber qué hacer cuando no sabemos qué hacer, he encontrado una ventaja inesperada en este nuevo entendimiento del funcionamiento de la mente. Cuando no tengo un resultado o un reto específico como objetivo, el “modem” de mi mente personal aquietada se sincroniza con una sabiduría profunda y me proporciona revelaciones que incrementan mi propia relación con la vida, casi como un doctor que diagnostica y proporciona la cura para lo que tengo sin que yo tenga que involucrarme en el proceso.
¡Les deseo lo mejor en sus propias exploraciones, y espero poder seguir explorando este entendimiento con ustedes en las semanas y los meses por venir!
Con todo mi amor,
