MNCT 952- ¿Y si no lo eres?
“La vida es una serie de cambios naturales y espontáneos. No los resistas – eso sólo crea dolor… Deja que las cosas fluyan naturalmente hacia adelante de la manera que quieran. “
– Lao Tzu
Mi amigo y colega Aaron Turner describió una vez nuestro ´enraízamiento´ en la comprensión de la vida de dentro hacia afuera como una medida de qué tanto de nuestra experiencia nos parece estar hecha de pensamiento en vez de parecernos estar hecha de “pensamiento + factores externos” o únicamente de factores externos. Por ejemplo, si recibes una notificación de “Demanda Final” de una compañía de tarjetas de crédito y te sientes estresado, ¿estás simplemente sintiendo tu pensamiento en el momento, estás sintiendo tu forma de pensar acerca de un problema muy real, o es la cuenta de la tarjeta de crédito que está creando tu el estrés?
El juego (al menos como yo lo juego) no es pretender que sólo porque sabes que la respuesta correcta es “a” – Estoy viviendo en el sentimiento de mi pensamiento, no el sentimiento de mis circunstancias – tu respuesta honesta es también “a”. Ese tipo de argumento conceptual tiende a dejarnos perdidos en el estrés pero pensando que no deberíamos estarlo y/o deja molestos a nuestros amigos y clientes si intentamos decirles que “ya sabes, es sólo un pensamiento”.
En cambio podemos reconocer que, por ahora, no lo vemos de esa manera, ser pacientes y curiosos, y ver en qué otro lugar de nuestras vidas podemos realmente ver la conexión pensamiento/sentimiento y la naturaleza inventada de nuestra realidad personal.
Para ilustrar este punto, voy a compartir tres historias de momentos en los que pude ver los principios de Mente, Conciencia y Pensamiento en acción en mi propia vida, y quizá les ayuden a ustedes a recordar experiencias similares (o a embarcarse en experimentos similares) en su propia vida…
1. La comida frita es mala para uno, ¿verdad?
Años antes de que yo comenzara a ver que la mente funciona más como un proyector que como una cámara, tuve una experiencia que me pareció verdaderamente extraña. Estaba editando (irónicamente, como resulta ser) un manuscrito sobre la pérdida de peso, y en mi estado distraído me comí un plato entero de langostinos fritos y patatas fritas. Cuando salí del restaurante, manuscrito en la mano, podía sentir el aceite rezumando de mis poros y mi estómago notablemente distendido.
Estando juzgándome por haber ignorado todo principio que había en el libro acerca de la comida y lamentando mi gula dado que la comida frita es terrible para uno, un pensamiento tranquilo se coló en mi mente:
¿Y si los alimentos fritos fueran bueno para uno?
Ahora, yo no creí ni por un momento que eso fuera cierto – sólo pensé que sería interesante ver qué tanto de mi terrible experiencia post-alimentaria era el resultado de la comida y qué tanto era el resultado de mis ideas acerca de la comida. Para mi verdadero shock, al minuto de imaginar que vivía en un universo alternativo donde las cosas se freían para que ser sanas, la hinchazón se había ido, mi piel se sentía seca y fresca, y yo me encontraba un poco más admirado del poder de la mente.
2. “Odio el conflicto.”
Una vez un psíquico me dijo que algún día estaría a la vanguardia de un controversial nuevo desarrollo en el movimiento de la psicología/autoayuda que cambiaría el mundo. Me reí y descarté al psíquico como bien intencionado pero equivocado. La idea de que alguna vez yo estaría involucrado en algo polémico, y sobre todo en la parte delantera de la manada, a la cabeza, me parecía ridículo. Después de todo, odio el conflicto.
Sin embargo, para mi sorpresa, es exactamente donde me encuentro casi diez años después. No porque me haya enamorado del conflicto, sino porque el conflicto ahora parece una descripción de lo que ocurre cuando dos puntos de vista opuestos entran en contacto unos con otros, y no un eufemismo para “¡Esto es guerra!”
Así como mi vida ha progresado, mi enraizamiento – lo que me parece que existe sólo como un producto del Pensamiento y no como una parte permanente y generalizada de la realidad – se ha profundizado. Mi bienestar emocional ya no parece ser el resultado de mi dieta. Los rasgos de personalidad ya no parecen estar escritos en piedra. Y la forma en que percibo la vida parece mucho más fluida, transitoria y sujeta a cambios que en cualquier otro momento.
3. La Fiesta de los Grammy
La gente a menudo se ríe cuando escuchan que yo me considero tímido, pero hasta hace unos años, hubiera hecho casi cualquier cosa para evitar situaciones sociales con más de unos pocos amigos cercanos o familiares. De hecho, cuando mi primer libro salió en Londres, les dije a los editores que haría cualquier entrevista que programaran en cualquier lugar del mundo para ayudar a promover el libro, pero que no iría a mi propia fiesta de lanzamiento del libro si decidían realizarla.
Así que, uno o dos años después de haberme topado con este entendimiento, cuando un amigo nos invitó a mi esposa y a mi a su fiesta anual de los Grammy, mi corazón se hundió. Yo sabía que iba a ir, pero también sabía que prefería meter cerillos debajo de mis uñas – porque soy tímido. A continuación, un nuevo pensamiento se coló en mi conciencia:
¿Qué tal que no lo eres?
Este pensamiento de alguna manera se afianzó, y me di cuenta de que mi auto-diagnosticada timidez era verdadera sólo una parte del tiempo. Lo que sucedía era que en algún momento de mi vida había decidido (sin darme cuenta) que era tímido, y siempre que me veía atrapado en pensamientos inseguros al estar rodeado de gente, era “prueba” de mi timidez; mientras que si me sentía cómodo era sólo una extraña anomalía que podía ignorar o explicar.
Así que fui a la fiesta como un experimento, no pretendiendo tener seguridad en mi mismo, sino más bien curioso de ver lo que sucedería si dejaba de dar crédito a mi teoría de “yo soy tímido”. Lo pasé tan bien que mi esposa tuvo que arrastrarme lejos de la fiesta (básicamente la primera vez que nos sucede), y toda una serie de nuevas experiencias se me han hecho disponibles.
¿Y para ti?
¿Te parece imposible cambiar hasta que algo más haya cambiado en el exterior?
¿Crees que necesitas cambiar tu personalidad para funcionar más eficazmente en la “realidad” de un mundo en el que un perro se come a otro perro?
¿Crees que eres muy tímido o inseguro, o no creativo, o simplemente “no eres el tipo de persona que …?”
¿Qué pasa si estás equivocado? ¿Qué pasa si ya no lo crees? ¿Qué pasa si no lo eres?
¡Diviértete, aprende montones, y feliz exploración!
Con todo mi amor,
